Renault y McLaren se encuentran en su último año de colaboración y parece que las aguas no andan nada calmadas entre ellos.
Los equipos del Mundial pueden realizar test privados antes del próximo Gran Premio de Austria siempre que los realicen con monoplazas de dos temporadas anteriores para evitar suspicacias a la hora de evolucionar piezas y elementos.
McLaren ya anunció recientemente que no podría optar a esos test privados, Andreas Seidl, el máximo responsable de la escudería británica, era el encargado de aclarar la situación:
“Desde el punto de vista deportivo es un problema no poder ofrecer a tus pilotos esa oportunidad de volver a conducir un monoplaza“.
“Nosotros con Lando hemos organizado jornadas de karting y un test con un F3. Ahora esperamos poder hacer lo mismo con Carlos y ambos trabajarán en nuestro simulador“.
Renault no da las PU
A finales de 2017 McLaren acabó su acuerdo con Honda y llegó Renault como nuevo “socio” aportando sus motores y tecnología.
El MCL32 de la temporada 2018 habría sido el monoplaza elegido para esos test privados, pero según McLaren, los responsables de Renault no han querido suministrar las PU (power units) necesarias para ello.
En el “off the record” se habla de que el motivo principal para esa negativa es el nuevo cambio que McLaren va a realizar en 2021 en cuanto a motores con la llegada de Mercedes.
Renault y el equipo británico acaban su relación a finales de esta temporada 2020 que todavía ni ha empezado y que se presenta complicada tal y como van las cosas ya en estos momentos.
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